Como si de Bourne, Bond, o Lara Croft se tratara,
Netflix intenta de crear un nuevo héroe popular del cine de acción, mostrando
al público a Rachel Stone (Gal Gadet) —miembro del MI6—, que auxilia a su equipo
hackeando los sistemas para que los agentes de campo logren acceder a sus
objetivos. Pero disímiles escenarios avivan que la organización permanezca expuesta
y la agente Rachel tenga que impedir en su misión más peligrosa hasta el
momento.
En un trabajo en un chalet de esquí en los Alpes, Rachel
y su equipo disipan su misión, pero descubren a Keya (Alia Bhatt), una hacker
india huérfana de 22 años. Ella y un escurridizo socio aún por revelar buscan
acabar con La Carta robándoles su programa de inteligencia artificial, conocido
como El corazón, que contiene el poder de controlar toda la información del
mundo. A medida que se desarrolla su juego trotamundos de mantenerse alejado,
ocurren traiciones y aumentan las apuestas.
Esta es la idea fundamental, y con base en su montaje
y acción, el filme entretiene, pero sin aportar realmente nada al género y sus héroes.
“Heart Of Stone” (su título original) evidentemente
tiene todas las peculiaridades de un intrigante thriller de espías: una semidiós
que se sacrificaría por el bien mayor, combatiendo contra un despreciable personaje
que no se contendría ante nada, un secreto que gira acerca de un eficaz
dispositivo de inteligencia artificial, un conjunto de locaciones
internacionales fotografiadas, y muchas acrobacias que retan a la muerte.
El inconveniente es que distinguimos esa mixtura de
elementos (algunos hasta fantasiosos) hace unos meses —solo que muchísimo mejor—
en “Misión: Imposible—Clases de muerte Parte 1”. ¡Qué nada!
Volviendo
a la película “Agente Stone”, hay
un innegable sentido de parodia sobre una trama, que pende de un ordenador que
usa algoritmos y los cineastas están proclives a esta toma de decisiones poco “creativas”.
Lo que quiero enfatizar es que atrás quedaron las probabilidades del ser humano
como tal y todo lo ordena un computador según el filme observado.