miércoles, 29 de noviembre de 2023

Past Lives

 


“Past Lives”, fue un éxito en el Festival de Cine de Sundance en enero y es de los primeros filmes que podemos escribir es un serio aspirante a ganar el “Oscar”, después de conquistar el premio a la mejor película en los Gothams. Esta película pisa fuerte debut como directora de Celine Song, protagonizada por Greta Lee como una mujer nacida en Seúl que, después de casarse con un estadounidense (John Magaro), se reencuentra con un amigo de la infancia de Corea del Sur (Teo Yoo).



“Past lives” se avecina sobre el tema de una maravillosa historia de amor, entrecortada por la espada del buen destino. La directora debutante mitad canadiense, mitad coreana, Celine Song narra la historia a modo de flash back de dos amigos que a lo largo de todos años que se echaron de menos, se anhelaron, se lograron a olvidar, hasta se reencontraron y se despidieron. Visto así el asunto, luce indeterminado, pero en realidad es tan sencillo a la vez el asunto; que resulta resplandeciente, penetrante y admitámoslo: adolorido.

Song te lleva a los universos de sus interlocutores: a la delicadeza por ambicionar sin retocar los afectos. En la medida que se desenvuelve “Past Lives” —entre Nora y Hae Sung—, esbozando ligeramente [en el sentido de tenue] cómo se han desarrollado sus respectivas vidas cotidianas. Aun así, Nora —y el desempeño actoral finamente medido de Greta Lee— son el centro gravitacional de la película

Pero por otro lado la historia recrea el paso del tiempo sin sentido precisamente por su silencio atronador, es decir esas nostalgias que desde la niñez conservamos y para los asuntos del amor. Así que en una retrospectiva la directora nobel nos arrastra hacia los recovecos interiores, esos pasos del alma sinceros que condicen el alma. La honestidad de la película —su intimidad, nivel humano, espacios humildes y falta de brío visual en el sentido de atrevimiento— es uno de sus puntos fuertes y que calan hondos en el habitante de la sala de cine.

Cada vez que optamos a conciencia una “calzada en la vida”, estamos anteponiendo no tomar otra distinta, y en la medida en que nos van pasando los años, mayor es asimismo la idea de pensar y sin remordimiento lo que hubiera podido haber sido y que otro tipo de personas hubiéramos conocido. Y lo expreso en el sentido de aprobación y resignación sobre la vida que vivimos. Esta podría ser la idea madre de la extraordinaria ópera prima de Celine Song y considero apunta desde ya a los “Oscars”.