Un poco tarde llega a Colombia este buen film de Rodrigo Cortés, que intenta en un thriller con dosis de lo sobrenatural, diseñar un discurso sobre que los asuntos paranormales son muy serios como para que anden por ahí, algunos seres humanos, mostrando que son seres con poderes sobrenaturales.
Historia pues sólida donde un Robert de Niro gestiona la credibilidad suficiente de la trama, donde el elemento sorpresa siempre está a alcance de los espectadores. Y es que el guión escrito también por Rodrigo Cortés no recae en ningún tópico, los diálogos están justos y medidos, y los todos los modelos actanciales resultan creíbles. Cabe enfatizar sin embargo, que el cineasta español se adapta a la dirección estilo Hollywood, lo cual le puede quitar un poco de su condición de cineasta de autor (recordemos su "Buried"). Pero bueno, son reglas para trabajar en un mundo, que sin lugar a dudas el español ha entrado con pie derecho.
!Ah! Al final, la historia deja la pregunta abierta: ¿Existen realmente los psíquicos? Pues hay una frase del guión que queda en la mente del espectador: "Si no hay pureza en la intención, puedes acabar creando mostruos".
Gonzalo Restrepo Sánchez
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