Desde el punto de vista
de la mente de una niña, este magnífico film del cineasta Benh Zeitlin, nos plantea sin ambages, cómo
debe ser mirada la felicidad y la muerte en “los hijos de la tierra”, según se
define la niña protagonista, llamada Hushpuppy.
Soledad e inocencia,
marcan el punto de partida para un discurso en apariencia sobre el abandono y
los escasos afectos, pero que la mente humana debe cortejar, como si una
oportunidad para sobrevivir surgiera.
Nunca antes había escuchado
unos diálogos tan inteligentes y creíbles es una niña, que vaticina siempre su
devenir más cercano en su imaginario personal, en la oportunidad de sobrevivir, en un ritmo de la cinta nada forzado.
Pero, si de enojarse ante ello se trata, no olvidar las buenas intenciones en
la vida. Moraleja: Y es como lo escuché en un reciente film: “Lo que nos
define, es como nos levantamos después de caer”.
Gonzalo Restrepo
Sánchez
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