domingo, 17 de febrero de 2013

(If...) Si... llegase a ocurrrir con los "Oscars", o las ganas de engañarme a mí mismo



Las dos películas con más opción a la mejor en la entrega de los “Oscars” son “Lincoln”, de Steven Spielberg y “Argo”, de Ben Affleck. Y es que ambas películas tocan temas políticos de la vida norteamericana. La primera, importante para historia de los Estados Unidos en clave de drama; y otra (me refiero a “Argo”), que en clave de thriller, nos plantea asuntos en el terreno geopolítico que vinculan a los Estados Unidos (aunque “La noche más oscura” o “Zero Dark Thirty”, también se puede enunciar en este contexto).

Si ninguna de las dos películas antes mencionadas gana la codiciada estatuilla (hablo en si condicional), “Amour”, de Michael Haneke, puede ser la ganadora y no debe de sorprender a nadie, ya que nos lleva a la ineludible conclusión de un texto de Faulkner: "Entonces solo recordaba que mi padre decía, que el sentido de la vida era prepararse para estar muerto mucho tiempo". Y es que la realidad nos indica que nos alejamos de la muerte caminando pronto hacia ella.

Si (reitero lo condicional), ocurre lo anterior, Chile con “No”, podría ganar un merecido “Oscar” al mejor film extranjero. Pero todas estas suposiciones me llevan a un pensamiento del cineasta Peter Greenaway, del cual se basa mi reflexión: “El cine ha de servir para contar algo más que historias”. En este sentido, no debemos olvidar lo que el semiólogo y escritor Umberto Eco igualmente enfatiza, al señalar que la democracia se salvará, únicamente si logramos del lenguaje cinematográfico, no solamente una fascinación a la imagen, sino a la reflexión, al discernimiento.

Respecto a los demás premios de la Academia, pienso que los “Globo de Oro” y los “Bafta”, ya han indicado con sus galardones, lo que puede ocurrir en la noche de los “Oscars”, sin que haya sorpresa alguna.

Gonzalo Restrepo sánchez