miércoles, 29 de noviembre de 2023

“Arde Notre Dame”

 

“Arde Notre Dame” es una película dirigida por el cineasta francés Jean-Jacques Annaud. La dramatización del incendio de Notre-Dame de 2019 tiene un enganche estable y registra las aproximadamente 12 horas que duró el incendio con (creería) todos los detalles.

Annaud custodia todas las cosas de un desastre con agilidad e inteligencia. Además, con un elenco de personajes (bomberos, guardianes de iglesias, clérigos, inclusive el propio Emmanuel Macron, que da a la película su interés), no obstante, los diálogos resultan por momentos hasta tontos. Y el público parisino, capturado a través de imágenes de archivo de noticieros, facilita un telón de fondo verídico. En este semblante hay algunos datos sugestivos sobre las propias técnicas de extinción de incendios.

Notre Dame la estrella de cine de 850 años con admiradores internacionales, un miserable tenaz en forma de llamas que se extienden, además, de los héroes valerosos que salvan vidas para ganarse la vida pero a quienes, aquí, se les demanda que preserven la integridad estructural de la catedral; son los protagonistas de un sencillo filme pero cargado de emociones generadas, entre otras, por reliquias religiosas de valor incalculable: una corona de espinas que se cree que es original de la Crucifixión y un clavo de la Cruz.

Sabemos cómo termina la historia: la catedral sigue en pie, las reparaciones prosperan y nadie sucumbió. Pero Annaud, coguionista con Thomas Bidegain (recuerden la famosa “La Famille Belier” y que tuvo remake) ofrece por momentos un filme lleno de suspenso innegable ya que los bomberos no tienen idea si la edificación, debilitada por el calor y el agua, colapsará o no, llevándose consigo a muchas estructuras cercanas.

No es que sea la mejor película de Jean-Jacques Annaud, recordado por muchos filmes —“El nombre de la rosa” (1986), “El amante” (1992) —, pero entretiene. Su puesta en escena tiene muchos clichés, pero la ambición de Annaud para imágenes apasionantemente categóricas, son suficientes. Interesante película en el sentido de observar lo cerca que estuvo París de tener despojos en su núcleo urbano, en lugar de la icónica estructura gótica a la que el jorobado de Víctor Hugo llamaba hogar.