“No te pares demasiado
cerca al borde de la fama” le dijo Hitch a Grace, aun en los tira y afloja
porque el cineasta pudiera tener de protagonista a Grace en su reciente filme “Marmie”.
Y esto es una gran verdad para un personaje como Kelly que conquistó el corazón
de todos y logró muchas más cosas en el principado de las que se observan en el
filme, que inauguró el festival de cine de Cannes este año.
A mi entender lo que se
cuente o no (bien o mal), no resta categoría a un filme, que tiene defectos de
ritmo y montaje cuando se intenta abordar tanta cosa alrededor de los Grimaldi
y las emociones. No obstante, este retrato con buenas intenciones, me parece que cumple las expectativas y los
actores lucen en sus papeles, para confrontar lo que realmente existe en ese
mundo élite de príncipes y reyes.
A un ritmo pausado
pues, la cinta recoge solo algunas fracciones de la vida de Grace y “Ray”,
donde no todo fue color de rosas, y hubo que aproximarse más el uno hacia el
otro como pareja y sacar adelante un principado, que a la postre es patrimonio
de los franceses.
Gonzalo Restrepo
Sánchez
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