En estos análisis sobre
los films más importantes a mi juicio para ganar el “Oscar” a mejor, bien vale
la pena traer a colación también, “Zero
dark Thirty”. Este film de Kathryn Bigelow arranca con un fundido a negro, para
evocar en breves segundos el fatídico 11 de noviembre en el Word Trade Center,
para luego en imágenes en tono de documental (sin serlo, a la larga),
mostrarnos un hecho real que nos lleva a muchas emociones. La principal quizá,
la condición del ser humano y la guerra, independientemente del lado en el que
estemos luchando.
Pero el hecho
específico de la captura de Bin Ladem en la película, confronta (con
implacables imágenes reales cargadas de todo el ideario del ser humano en zonas
de conflicto), hechos cargados de verismo para llegar a conclusiones nada
maniqueistas, sobre la pesadilla de una zona del planeta que a la
larga nos deja exhaustos.
En este contexto, la
cámara con pulso firme señala, cuestiona, en una estructura cinematográfica
implacable, (por supuesto bien diseñada en el guión), aunque también el montaje
de la película, juega en esta oportunidad, un papel muy, pero muy importante.
Ahora, los niveles de espionaje y terrorismo son manifiestos,
y, personajes como una mujer de la CIA llamada Maya (Jessica Chastain,
ganadora del “Globo de Oro” y el “SAG” recientemente), Dan o Ammar entre otros:
Confieren a la historia toda una épica de los tiempos que vivimos y los
intríngulis detrás de las noticias (que no podemos ver) y los asuntos
geopolíticos.
Pero más allá de lo
observado, el film es altamente recomendable, pues deja de manifiesto, una vez
más, el poder del relato audiovisual en los tiempos que vivimos, para
comprender los sucesos que cambian la historia de la humanidad. Y “Zero dark
thirty”, es una de ellas”.
Gonzalo Restrepo sánchez
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