domingo, 28 de abril de 2024

FICCI No. 63: "Carropasajero"

Como introducción inicial, señalar que esta es una película y guion de Juan Pablo Polanco y César Alejandro Jaimes, en una coproducción con Argentina y Alemania (pareciese que las coproducciones están favoreciendo al cine de arte y ensayo). Al iniciar con la pregunta: qué es un carropasajero. Pues una vieja camioneta de platón adaptada para llevar pasajeros cruzando el desierto de La Guajira en Colombia.

Esta definición del medio de transporte, y sumado al sonido de metal chirriando a punto de destrozarse, es un filme a mi modo de ver de arte y ensayo, donde además, los pasajeros (entre ellos los aborígenes Wayúu) son los estereotipos protagonistas y que, a través de todos los momentos de quietud en ese viaje de atravesar el desierto guajiro, en sus mentes solo cabe la abstracción (de la “vida y la muerte”). Ya que, como muy bien sabemos poner en claro: “La mejor manera de dominar los estereotipos y si se desea, desterrarlos, es estudiarlos y comprenderlos” (González Galiana, 1999, p. 26).

Tres cuestiones a determinar sobre “Carropasajero”: al observar el filme de Polanco y Jaimes, es difícil concebir una idea fiel sobre las emociones ocultas de los protagonistas (rostros imperturbables y ese cargado de vejez y sabiduría de Josefa). Lo segundo son esos larguísimos diálogos, algunos en “voz alta” (otros en off sobre el mismo personaje) para “hablar” con uno mismo, y, los planos —largos igualmente y pocos emplazamientos de cámara en la puesta en escena.

Y por último, los valores acusmáticos de la diégesis, que por momentos abruman por su “sequedad” —arena, ruidos del carropasajero, etc. — [que recuerda la propuesta de topología del sonido en relación a la imagen que propone Michel Chion, 1998, pp.69-88], a excepción del canto vallenato, cuando cotejamos y escuchamos “Vení, vení” (del juglar Juancho Polo Valencia), y que en su testimonio sumado a otros —“el canto” con la tristeza— añaden a los valores intradiegéticos. Todo lo anterior, invita a reflexionar de la cinta en su aspecto de “realidad” (evito el spoiler) y lo emocional en “la alegría y la tristeza”, o la tonada con la tristeza. Siendo de alguna manera el tono del filme.

Dos frases entre esa catarata de información verbal (muchas a través de la voz en off del mismo interlocutor). Y es la que formula la mujer Josefa [fallecida, sí así es] y su familia Wayuu en ese “viaje a ninguna parte”: aquella y parafraseada cuando enuncia que “la fuerza de la muerte puede atraer el terruño otra vez” o “palabras sobre la arena”. Aquí estaría la clave para entender el porqué de tanto soliloquio, y sumándole la sustitución del protagonismo masculino.

Por otro lado, esos “planos de Josefa” cargados de serenidad y ancianidad, y que el director dispone de la cámara, no para escudriñar contradicciones ni tampoco dejando que los apegos o las turbaciones usurpen el control. Todo deviene de la idea de regresar siempre al lugar y punto de partida una tierra añorada.

Otro punto de vista que me gustaría plantear, es que estamos ante una “road movie” —muy su generis dirían algunos—. Pero “road movie” (sin alter ego alguno) al fin y al cabo. Algunas ideas que sustentan mi reflexión: el rasgo más llamativo es el que Dupuy denomina “sistema del automóvil” como estandarización: el vehículo ha hecho desaparecer en gran medida la diversidad territorial más allá de las fronteras nacionales (Dupuy, 1995, pp. 185 y 188). En “Carropasajero” el transitar entre Colombia y Venezuela.

Especialmente en lo que se refiere al paisaje, espacios abiertos frente a espacios claustrofóbicos que se observan en “Carropasajero”, obligan a replantearse la relación con el género cinematográfico. En cualquier caso, películas como estas suministran un campo de referencias muy profundo para la interpretación de un proceso tan complejo.

A modo de conclusión, dos serían las principales líneas de desarrollo de la “road movie”. A juzgar por este tipo de cine: las particularidades bien acentuadas (la emblemática Easy Rider”), y como señalan otros expertos el cine de autor on the road, apoyada en la experimentación formal y narrativa de sus creadores (el paradigma estaría en película “On the road” del director Walter Salles).