martes, 7 de enero de 2014

Carta de una desconocida



Segunda película norteamericana de Ophüls, se rodó en los estudios de la Universal, con apoyo de maquetas de Viena. Cimentada en la novela de Stephan Zweig, ha sido objeto de varios remakes: "Feliz año, amor mío" (México, 1955) y "Carta de una mujer desconocida" (China, 2004).

La acción tiene lugar en Viena a partir de 1900 y narra la historia del amor no correspondido de Lisa Berndle (Joan Fontaine) por el músico Stefan Brand (Louis Jourdan). El filme examina el amor magnánimo, cautivador y apremiante de Lisa por Stefan, un pianista, mujeriego y egocéntrico. 

Una de las obsesiones garciamarquianas son las cartas. En “Cartas del parque”, en “El amor en los tiempos del cólera”, etc. Las cartas, ese conducto regular para las cosas que a veces, digo “a veces”, no nos atrevemos a decir en persona, resulta ser un elemento válido en el contexto dramático, siempre que se amparen en las decisiones pasadas que obligan a un nuevo presente.

Además, permite establecer el concepto de crónica (como el film de Max Ophüls). En “Tiempo de morir”, de Ripstein, basado en un guión de Gabo, podemos escuchar: “Aprendí a tejer esperando tus cartas”. En el caso que hoy nos ocupa, cartas que hablan de cómo morir sin la presencia del ser amado.

Gonzalo Restrepo Sánchez
Visite: www.elcinesinirmaslejos.com