“The mother of mine” (2005)
del director Klaus Härö, toma como punto de partida la Finlandia de 1943, para
en un largo Flash back, mostrarnos las difíciles decisiones de los padres hacia
los hijos. Eero (Topi Majaniemi), un niño finlandés, es pues el hilo conductor
de este melodrama, que topa con las incertidumbres de los seres humanos.
La trama resulta pues
una alegoría sobre la niñez de aquellos quienes se convirtieron en hijos sin
tierra ni padres, tras la Guerra de Laponia. Un nombre que se utiliza
actualmente para referirse a las hostilidades que hubo entre Finlandia y la
Alemania Nazi entre septiembre de de 1944 y abril de 1945. El calificativo
deriva de la provincia más septentrional de Finlandia, Laponia, donde ocurrió
el enfrentamiento. Desde el verano de 1943, la Plana Mayor del Ejército Alemán
diseñó un plan ante la eventualidad de que Finlandia pudiera firmar una Paz
separada con la Unión Soviética.
Esto no lo enfatiza la
película, que más bien, cargada de relaciones a veces francas por los adultos y
los anhelos profundos de un niño, resulta ser la parábola que cumple su función
de complementar que, además de ser uno agradecido en la vida, la razón de ser
en ella; no es otra que los hijos, aunque en el pasado, hayamos cometidos
desaciertos que pudieran marcar sus vidas. “Mother of mine” es una buena
película, que nos aproxima más a la vida de los hijos, que a la larga es
nuestra propia vida como padres.
Gonzalo Restrepo
Sánchez
Visite:
www.elcinesinirmaslejos.com