Basada en un hecho
real, narra cómo durante una Navidad de la Primera Guerra Mundial,
concretamente en diciembre de 1914, soldados alemanes, franceses y escoceses
dejan a un lado sus diferencias y proponen un marco de confianza.
Historia pues que deja
un gran mensaje a los países actuales. Las guerras a qué conducen, sino es a
acabar con vidas inocentes, que lo único que desean es vivir en paz. Nominada
al Oscar a mejor film de habla no inglesa en el 2005, bien vale la pena
precisar que los últimos quince minutos están demás en el film, generando un
anticlímax, que echa por tierra lo bien que venía desarrollándose no solo la
trama, sino ese ritmo nada acelerado, a pesar de las armas.
Las historias sobre la
guerra, siempre han sido tema de muchas acciones, no precisamente bélicas, para
abordar la condición del ser humano: unos realmente nacidos para morir, y,
otros para vivir.
Gonzalo Restrepo
Sánchez