HIGH NOON (SOLO ANTE EL PELIGRO)

Este es un claro ejemplo de películas que continúan vigentes con el paso del tiempo. la razón obedece en este caso a su director Fred Zinneman y su relato cinematográfico. Es evidente que ante un tema de pronto ya conocido, el cineasta logra mantener el ritmo adecuado a una situación de la cual ya tenemos suficientes elementos de juicio a lo largo de la intriga principal.

Otro elemento a favor es como el tiempo se acomoda a los intereses elípticos para sobornar lamente del espectador, con la ayuda de la música de Dimitri Tiomkin en la aprehensión para algunos momentos diegéticos. En este sentido el rostro de Gary Cooper también nos pone en aviso sobre sus pensamientos.

¿Algo nuevo en la revisitación de esta cinta? Pues no mucho, simplemente confirmar que "la cámara es el corazón del cineasta", que no hay reglas, que todo obedece al momento feliz de haber realizado una cinta sin muchas pretensiones, pero que se salió con la suya.

Gonzalo Restrepo Sánchez
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